DYLAN DOG RESEÑA: CEREBUS (VOL. 1)

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Inició como una parodia a Conan el Bárbaro, pero terminó mostrando el talento del gran Dave Sim

Antes que nada, me presento. Soy Víctor Segovia (alias Dylan Dog) y quiero iniciar aquí una pequeña sección, donde reseñaré algunos cómics. Unos serán de Marvel, otros de la DC y otros de la competencia.

Y si vamos a comenzar, comencemos duro; con una serie llamada Cerebus.

Cerebus Dave Sim cover

Reseñar esta obra no es tarea fácil y por muchas razones. Primero comienzas preguntándote ¿cómo una parodia a Conan el Bárbaro se convirtió en otra cosa? ¿Cómo en un comic de fantasía, su autor aborda temas densos y filosóficos tales como las creencias espirituales, el abuso de poder y salir bien librado? Dave Sim es, ciertamente, una singularidad de autor que no volveremos a ver por un buen tiempo.

En el año de 1977 un artista daba sus primeros y osados pasos, lejos de la presión e intervención de las editoriales, para lograr hacer el comic que quería; sin quererlo estaba haciendo historia, aquel muchacho canadiense.

De trazo fuerte pero eficiente, con influencias del género de folletín (PULP) y clásicos como Hal Foster, el puerco antropomórfico se presenta como un guerrero que alquila su espada al mejor postor. Sus aventuras son, en un comienzo, parodias a las que tuvo el gran señor de Aquilonia, pero la comedia poco a poco se va diluyendo y nuestro porcino guerrero se hace preguntas, tal como el lector, pero mantiene ese impulsivo temple ante todo.

Cerebus es una historia que engaña a primera vista, no por nada su origen como parodia, pero como es normal en el medio, hay que adentrarse para salir de las dudas ¿Es una historia cómica que todos pueden leer? Y la respuesta es compleja, no es un comic apto para toda la familia por el grado de violencia que está presente (pero no llega a los extremos de algunos obras manga o algún hecho de la vida real) pero, por sobretodo, la madurez del guión.

Cerebus busca la gloria y el reconocimiento que merece un guerrero de renombre, como anteriormente dije, alquila su espada con tal fin, creyendo que en uno de esos “empleos” le dé el reconocimiento que anhela. Comienza como un ladrón, luego pasa a mercenario conociendo en el camino magos, reyes, tribus pérdidas, ciudades amuralladas e incluso deidades y cultos son parte del elenco de secundarios y escenarios donde vemos a nuestro puerco interactuando y blandiendo su espada.

El primer volumen recopila los primeros veinticinco números del personaje y si bien pensé que era una exageración del autor llamar a estos recopilatorios “guías telefónicas”, cuando lo tienes entre mano, confirmas lo dicho. Incluso en ese tipo de cosas, esta historia trató de marcar la diferencia y lo logró. Muchos artistas han seguido el ejemplo de Dave Sim, como el caso del inglés Paul Grist y su obra Jack Staff, así como Hellboy y Usagi Yojimbo.

Pero no todo es sobre Cerebus y sus enemigos, hay personajes secundarios que resultaron tan interesantes que regresan y no para hacerle fácil la vida a nuestro protagonista, como son los casos del Mago Albino, Red Sofía y el enmascarado que eligió el peor de los insectos para hacerse un disfraz (la cucaracha). Y apariciones de parodias al Príncipe Valiente, el gran Groucho Marx convertido en el dictador de una enorme metrópolis, referencias a autores del comic de superhéroes: más parodias a los orígenes y motivaciones de los mismos, unido bajo un tono de historias medianamente conectadas que, a la larga, se unen en una sola historia.

Para toda aquella persona que quiera leer algo de autor y muy alejado de la endeble continuidad de los cómics de superhéroes, esta es una buena opción. Y para aquellos que quieran una lectura para iniciarse en el arte secuencial pero alejada de los problemas de las grandes editoriales, la espada de Cerebus les dará un viaje como ninguno.